No hay duda alguna al respecto. A pesar de la rica y extensa gastronomía de una ciudad como Córdoba, el flamenquín se alza con el primer puesto en el pódium de la cocina de nuestra provincia.
Por ello en la carta de nuestro restaurante «El Jardín del Delirio» también le hemos otorgado a este exquisito manjar el lugar prioritario que legítimamente le corresponde, ofreciendo un producto final basado en la calidad de sus componentes que, aunque básicos, merecen ser los mejores.
Todo aquello que convierte al flamenquín cordobés en el rey de nuestra mesa.
Aunque estemos muy acostumbrados a tenerlo entre nuestros menús ya sea en casa o en bares, tabernas y restaurantes; aunque su receta se haya extendido por toda España y sea plato fijo en toda la geografía nacional, aunque ya nos parezca un clásico y no llame nuestra atención como plato novedoso…siempre siempre será una apuesta segura en nuestra mesa, la suya y la nuestra, por aclamación popular.
Su orígenes son algo inciertos y algunos historiadores expertos en gastronomía lo sitúan en la localidad de Bujalance, mientras que otros sostienen que ya los romanos pudieron utilizar la receta en la zona de la localidad cordobesa de Montilla.
Sea como fuere, y afortunadamente para todos nosotros la receta ha perdurado y se ha transmitido de generación en generación conservando su formato original.
Los ingredientes básicos y tradicionales del flamenquín cordobés son:
- Filetes de lomo de cerdo ibérico.
- Jamón ibérico.
- Huevo.
- Pan rayado.
- Sal.
Algunos de los secretos para que el flamenquín sea jugoso y fácil de degustar son:
- Los filetes de lomo deben estar loncheados finos y haberse prensado para dejarlos lisos.
- El jamón debe estar cortado también en lonchas no muy gruesas y contener tramos de tocino para aportar jugosidad y ternura.
- Una vez de realice el rollo de lomo y jamón ibérico, es necesario introducirlos en el frigorífico entre dos y tres horas para que la textura se haga compacta y no se abra.
- Pasado ese tiempo, envolver primero en huevo batido y después en pan rayado para proceder a freírlo.
- No iniciar la fritura con el aceite demasiado caliente para evitar que quede crudo por dentro y demasiado tostado por fuera.
Estaremos encantados de servirles el auténtico flamenquín cordobés elaborado artesanalmente en nuestra cocina de «El Jardín del Delirio» disfrutando de la mejor compañía junto al casco histórico de nuestra ciudad.
Deja una respuesta